The Legend Of Zelda: The Wind Waker HD Wii U

The Wind Waker es la décima entrega en la saga The Legend of Zelda de Nintendo. Fue lanzado originalmente en 2002 (Japón) y 2003 (Estados Unidos) para Gamecube.

Vino a continuación de dos títulos con bastante peso en la serie: Ocarina Of Time -visto por muchos como uno de los mejores videojuegos de la historia- y su secuela Majora’s Mask.

Al contar con gráficos renderizados con cel shading (el estilo caricaturesco que lo caracteriza) fue recibido con un poco de controversia. Los fanáticos esperaban algo como la primera demo que se mostró para Gamecube, y se sintieron decepcionados al ver a un Link joven y un mundo un poco ‘más infantil’. A pesar de esto fue un éxito, ayudó a levantar las ventas del Gamecube en su momento y es uno de los mejores juegos dentro de la serie La Leyenda de Zelda.

En 2013 Nintendo lo relanzó en Wii U en versión HD. No tuve Gamecube, así que aproveché la oportunidad y lo adquirí para mi Wii U. Es una materia pendiente en mi lista jugar más juegos Zelda, vengo atrasado pero de a poco me voy poniendo al día 🙂

Lo más cambiado en esta nueva versión son los gráficos: alta definición a 1080p y un nuevo motor de iluminación, lo que hace que se vea espectacular. Se puede decir que los gráficos caricaturizados no eran algo nuevo para la serie. Tanto Link’s Awakening para Gameboy y A Link To The Past en Super Nintendo podrían definirse como caricatura. Pero esperando los gráficos realistas y oscuros del demo comentado, se generaron muchas falsas expectativas.

De la mitología que caracteriza a la serie con un toque medio celta, nos vamos a una isla en medio del océano, que va a ser uno de los grandes protagonistas a lo largo de esta aventura. La ambientación parece ser más inspirada en mitología Maorí y a veces con lo que parecen ser toques de las culturas Incas o Mayas. Esto le da un aire fresco a la serie, pero con elementos familiares que lo conectan a lo que ya conocemos.

Casi todos los títulos de la saga tienen muchas cosas en común, pero contamos con un entorno bastante distinto, y es bienvenido un poco de cambio. Al asumir el rol de Link, no nos despierta una hada, no tenemos puesta las ropas verdes característica, y no tenemos ningún ítem como la Master Sword o el viejo y querido escudo. En esta encarnación, Link se ha vuelto sumamente expresivo, y ver sus reacciones y caras ante distintas situaciones es muy divertido.

Los gráficos en alta definición son impresionantes. En juegos con detalles gráficos tan llamativos, me paso ratos paseando en los distintos escenarios sólo para admirar el diseño de los paisajes y niveles. También es parte de la gracia, porque en juegos de aventura como los Zelda, la exploración juega un papel importante para poder avanzar y descubrir elementos escondidos.

Los controles son muy parecidos a los de Ocarina Of Time. No tenemos botón para saltar, y se mantiene el sistema de apuntar a un enemigo y bloquear la mira para los ataques (lo que en el Nintendo 64 era el Z-targeting). No tenemos la Ocarina esta vez, pero tenemos el Wind Waker, un bastón de mando de orquesta, que nos permitirá para invocar distintos poderes.

Imagino que con el control de Gamecube debe haber sido divertido, pero es uno de los juegos en los que se aprovecha bastante bien el Gamepad del Wii U. Jugué varias veces con el Pro Controller, pero el Gamepad me quedaba más cómodo. En la pantalla táctil del Gamepad podemos cambiar entre la vista del mapa o de los ítems con el botón L. Y así se puede ver información del mapa mientras jugamos o cambiar de ítems a la carrera arrastrándolos a los botones en el menú, en plena batalla con un enemigo.

El menú de ítems de Wind Waker HD, aventura recién empezada para no spoilear tanto 😉

Como mencioné el océano es uno de los protagonistas, pasamos buena parte de la historia navegando de una isla a otra. El mapa es bastante grande, y se siente un poco más “open world” con un desenlace menos lineal que otros juegos de la saga. Se puede dejar de lado la historia central por un rato y explorar misiones en paralelo.

Por suerte en la versión de Wii U se incluyó una forma de navegar más rápido (obteniendo una vela especial para nuestra embarcación). Igual la ambientación durante la navegación es entretenida con los distintos elementos que van apareciendo en el mar y nos llaman a seguir explorando y descubriendo lugares y personajes nuevos.

Una característica muy interesante que se le agregó a la edición de Wii U son los mensajes en botella. Un concepto bastante antiguo y simple que se implementó de manera excepcional. Tiene integración con Miiverse, la red social de Nintendo en la cual se puede interactuar con otros jugadores, comunidades de distintos títulos y más. Mediante ésta, podemos dejar mensajes de texto, dibujos hechos con el lápiz en la pantalla táctil del Gamepad o capturas de pantalla en una botella y lanzarla al mar. Es así que nos encontramos con botellas a lo largo de nuestra aventura que fueron dejando otros jugadores. Es algo sencillo, pero que le agrega un toque de interacción y me sorprendió gratamente encontrarme con este tipo de ideas.

Como en todos los juegos de la serie, se incorporan elementos del género de puzzles, teniendo que resolverlos para avanzar, encontrar algún arma, salvar personajes, etc. Desde que jugué The Legend Of Zelda: A Link Between Worlds me empecé a dar cuenta que éste tipo de puzzle tienen un factor adictivo. Es genial trancarse con algo, y tener que empezar a usar la cabeza para poder resolverlo.

Muchas veces uno se encuentra en un “callejón sin salida”, o así parece a primera vista. Pero en esos casos mi razonamiento es “el juego no está roto, si no puedo avanzar acá es porque no debo o no me estoy dando cuenta cómo”. Así que insisto y empiezo a probar distintas cosas de lo que hay disponible, y así se encuentra la solución eventualmente. Creo que cuando era más jóven, estas cosas salían más fáciles… 😛

Nuestra aventura está acompañada por una excelente banda sonora. Originalmente fue compuesta por varios autores que incluyen a Koji Kondo (compositor del tema de Mario y Zelda) y Toru Minegishi que lo menciona como su mayor influencia. La música tiene influencia irlandesa (¡incluyendo gaitas irlandesas!) y andina, y complementa de manera genial el estilo artístico.

Ya terminé la aventura principal, pero se siente que quedan cosas por ver. Hay islas que descubrí en algún momento en el que no contaba con los ítems (o el conocimiento) como para avanzar, y debería volver a visitarlas. Y quedan pedazos de corazón por encontrar y tesoros hundidos por descubrir. Además de esto la “Second Quest” que caracteriza a varias entregas de la saga, donde podemos empezar desde cero nuevamente pero con algunos cambios menores (aunque no creo que arranque con esto por lo menos en el corto plazo).

Excelente título para quienes ya conocen la Leyenda de Zelda, y/o fanáticos de la aventura y exploración que quieran adentrarse en este mundo. Sumamente recomendable. Ahora a esperar el año que viene que se viene otro juego de Zelda al que solo jugué unas pocas horas y va a pasar por el mismo tratamiento para Wii U: The Legend Of Zelda Twilight Princess HD.